¿Que pensarías si un día al llegar a tu casa del trabajo o de estudiar, encuentras un regalo en tu habitación? Seguramente aunque estés cansado o decepcionado por alguna situación que tuviste durante el día, tu correrás a abrirlo.
Si el regalo es algo que no te gusto mucho lo vas a ver, luego a guardar y pensar que podrías hacer con el, aparentemente no te sera muy útil.
Pero si al día siguiente volviera a pasar lo mismo, nuevamente volverías a correr a abrir tu regalo, y si en esta ocasión encontraste algo que te gusta realmente lo vas a atesorar, era tal vez algo que estabas deseando desde hace mucho tiempo y ahora lo tienes, de seguro estarás agradecido con la persona que te envió el regalo.
Lo que te acabo de contar en las lineas anteriores pasa todos los días en nuestra vida y pasa desapercibido. Todos los días Dios nos regala un nuevo día, para que lo uses como a ti mejor te parezca. En ocasiones parece que el regalo no es muy bueno y trae problemas, decepciones o situaciones incomodas, pero otras veces el regalo trae felicidad, victorias, éxito. Dios te da un regalo todos los días, no siempre con todo lo que queremos pero si con lo que necesitamos.
Y recuerda siempre agradecer por ese regalo, porque Dios en su infinita misericordia nos da uno todos los días.
"Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana, grande es tu fidelidad" Lamentaciones 3:22-23
No hay comentarios:
Publicar un comentario